Blogia
josemarco

CALLE DEL BUEN PASTOR

Paseo sin mirar al reloj por la recoleta calle del Buen Pastor, en pleno Casco Viejo de Zaragoza. Es curioso el nombre de esta calle - tan evangélico y redundante - que, dentro de su sencillez y oscuridad, pasa casi inadvertida al caminante, a no ser que conozca el Centro de Profesores Juan de Lanuza o el antiguo colegio Santo Tomás de Aquino, regentado por la familia Labordeta y rehabilitado para convertirse actualmente en un frío Colegio Notarial. ¿Qué queda de aquel colegio, de aquellos desvanes, de aquellas aulas, de aquella enseñanza liberal? Muchos intelectuales se educaron en esas aulas, además del llorado poeta Miguel y de José Antonio. De entre ellos destaca el escritor de Mequinenza Jesús Moncada, tristemente recordado en estas fechas por su prematuro fallecimiento. Antón Castro ha elaborado en su blog una excelente elegía del autor de "Cami de sirga". Quizás ahora leamos y conozcamos más su obra. Un poco tarde tal vez, pero a tiempo para adentrarnos en el mundo del Ebro de los años sesenta, en la España rural anegada por embalses y en la sociedad de una época casi irreconocible para los más jóvenes.
La calle del Buen Pastor parte de la plaza del Justicia desde la que se contempla la monumental fachada barroca con adornos churriguerescos (algo desprestigiados desde el siglo XIX) y desemboca en el Mercado Central, milagrosamente en pie, ya centenario y en vías de restauración de su interior.
Los hermanos Labordeta recuerdan en sus escritos el fragor matinal del mercado, los variopintos olores y el despertar de la ciudad a mediados del siglo XIX.
Aún tenemos algo que recordar y evocar cuando paseemos con calma por la humilde y casi olvidada calle del Buen Pastor.

1 comentario

ana a. -

¡Qué interesantes siempre tus textos! Das mucha información que desconozco. Ni idea de esto que cuentas. Fascinante. Yo estudié en un Buen Pastor, no en esa calle, en un colegio con el mismo nombre.