ALIAGA EN LOS PAPELES
Al final de la jornada, suelo dedicar unos minutos a hojear la prensa local y, si tengo tiempo, la prensa nacional. Hoy me ha llamado la atención una columna de El Periódico de Aragón que publica un conocido periodista en la sección El Independiente. El título del artículo es simplemente Aliaga. Al principio creía que hablaba del consejero del Gobierno de Aragón, pero después me he dado cuanta de que se refería al posible cierre de la planta de cogeneración que la empresa Neoelectra tiene en el término municipal de esta localidad.
Me ha sorprendido que el periodista ofreciera una visión demasiado parcial y sesgada del problema. Me ha sorprendido que hablara de que en el pueblo "pasan cosas extrañas". Habría que matizar esta afirmación y aclararla más. Me ha sorprendido que afirme que la empresa "en ningún momento llegó a contar con los permisos necesarios". Es una afirmación incierta y muy discutible.
Pero lo que más me ha llamado la atención es la referencia que hace al consejero de Medio Ambiente, Alfredo Boné. Según el artículo, cualquiera puede interpretar que Boné tiene una casa en la calle Mayor o en la plaza de la Iglesia de Aliaga. La realidad es muy distinta: es propietario de una finca lejos de Aliaga y aguas abajo del Guadalope.
El final de la columna me ha vuelto a dejar perplejo. Relaciona dos hechos muy distintos en el tiempo y el espacio. Dos hechos que podrían confluir en un futuro, pero que hay que analizar por separado. El periodista habla de que el Ayuntamiento de Aliaga "está en quiebra económica". Y termina el artículo con la coletilla: "una desgracia total". Una afirmación casi tópica, sin matices ni explicaciones. Después de leer y releer estos cinco párrafos, casi no me reconozco como vecino de Aliaga que soy. Menos mal que he recibido información de fuentes más directas y fiables.
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Luis Antonio -