LA CIUDAD DORMIDA
Mientras la ciudad duerme,
te sumerges en mares de silencio
y acaricias las horas que se esfuman
cual pájaros de espuma.
Mientras la ciudad duerme,
un huracán de luz azuleante
se desata sin freno y sin recato
al filo del futuro.
Mientras la ciudad duerme,
se condensan sin tregua los recuerdos
y el eco de la vida
se transforma en un grito de esperanza.
Mientras la ciudad duerme
cortejas a la noche enamorada.
1 comentario
Luis Antonio -
Un abrazo, José Mª