EL TREN DE LOS ADIOSES
El tren de los adioses
surca las soledades y el silencio
del valle de la Val, cerca de Aliaga.
El tren de los adioses
se tiñe de los ocres y amarillos
de este plácido otoño,
preludio de los días más fugaces
de esta sierra olvidada.
El tren de los adioses
se viste de nostalgia y de ternura
al filo del crepúsculo
mientras el pastor muestra
sus eternas arrugas,
huellas de vida y luz,
memoria estremecida del ocaso.
1 comentario
Luis Antonio -